LOCALIDADES

Quintanar del Rey

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Quintanar del Rey

Un poco de historia

En el término municipal de Quintanar del Rey se han hallado vestigios que datan de la Edad de Bronce, fechados con una antigüedad de 3500 años. Hasta la Edad media, momento en el que nace la población, no se vuelven a constatar asentamientos humanos en la zona.

El pueblo no fue fundado hasta finales del s. XV, pues las tierras que hoy forman Quintanar, Casasimarro y Tarazona eran aldeas de Villanueva de la Jara y lo que aquí había eran unas “quinterías”, donde se refugiaban las familias que venían a labrar estas tierras. Cuando la gente se estableció aquí, en vez de volver a la Jara al terminarse las faenas agrícolas, nació, primero una aldea y después un pueblo que, cuando su población empezó a crecer se llegó a llamar Quintanar del Marquesado de Villena, hasta el año 1561, en que por la fidelidad de sus vecinos al señor Felipe V y algunos servicios hechos a su majestad empezó a llamarse Quintanar del Rey.

En el siglo XVI, Quintanar empezó a ser una población con cierta entidad, por lo que se hizo necesario nombrar un alcalde pedáneo con autoridad limitada y dependiente de la Jara. A mediados del siglo XVI, Quintanar del Rey era una aldea de Villanueva de la Jara y tenía unos 2000 habitantes. Se pidió la independencia municipal al Rey, en ese momento Felipe II, y esta le fue concedida a través de una «Carta Privilegio».

A finales del siglo XVI, Quintanar sufrió una importante pérdida de población debido a la emigración generada por la pobreza y a las muertes consecuencia de la guerra de Granada. 

En la Guerra Civil, la provincia de Cuenca permaneció desde el inicio mismo de la contenida, el 18 de Julio de 1936, hasta su conclusión definitiva, en Marzo de 1939, en el bando republicano. Por su situación alejada de los frentes y su escaso interés militar, tuvo que adaptarse a las nuevas situaciones que el devenir de la guerra imponía. Tras la Guerra, la Falange española de las JONS estaba organizada exclusivamente, a parte de en la capital conquense, en Mota del Cuervo y en Quintanar del Rey, donde estaba enclavada la Junta Provincial.

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Un poco de historia

En el término municipal de Quintanar del Rey se han hallado vestigios que datan de la Edad de Bronce, fechados con una antigüedad de 3500 años. Hasta la Edad media, momento en el que nace la población, no se vuelven a constatar asentamientos humanos en la zona.

El pueblo no fue fundado hasta finales del s. XV, pues las tierras que hoy forman Quintanar, Casasimarro y Tarazona eran aldeas de Villanueva de la Jara y lo que aquí había eran unas “quinterías”, donde se refugiaban las familias que venían a labrar estas tierras. Cuando la gente se estableció aquí, en vez de volver a la Jara al terminarse las faenas agrícolas, nació, primero una aldea y después un pueblo que, cuando su población empezó a crecer se llegó a llamar Quintanar del Marquesado de Villena, hasta el año 1561, en que por la fidelidad de sus vecinos al señor Felipe V y algunos servicios hechos a su majestad empezó a llamarse Quintanar del Rey.

En el siglo XVI, Quintanar empezó a ser una población con cierta entidad, por lo que se hizo necesario nombrar un alcalde pedáneo con autoridad limitada y dependiente de la Jara. A mediados del siglo XVI, Quintanar del Rey era una aldea de Villanueva de la Jara y tenía unos 2000 habitantes. Se pidió la independencia municipal al Rey, en ese momento Felipe II, y esta le fue concedida a través de una «Carta Privilegio».

A finales del siglo XVI, Quintanar sufrió una importante pérdida de población debido a la emigración generada por la pobreza y a las muertes consecuencia de la guerra de Granada. 

En la Guerra Civil, la provincia de Cuenca permaneció desde el inicio mismo de la contenida, el 18 de Julio de 1936, hasta su conclusión definitiva, en Marzo de 1939, en el bando republicano. Por su situación alejada de los frentes y su escaso interés militar, tuvo que adaptarse a las nuevas situaciones que el devenir de la guerra imponía. Tras la Guerra, la Falange española de las JONS estaba organizada exclusivamente, a parte de en la capital conquense, en Mota del Cuervo y en Quintanar del Rey, donde estaba enclavada la Junta Provincial.

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Qué visitar

Qué visitar

Fiestas y Tradiciones

San Marcos (Patrón de la localidad): Se celebra el 25 de abril. Quintanar comparte con Villagarcía del Llano una vieja tradición fruto de la intersección de sus patronos en una epidemia. San Marcos y San Miguel se desplazaron paralelamente a sus pueblos vecinos durante aquella epidemia. Desde entonces, el día de San Marcos, Quintanar del Rey se viste de fiesta, y el de San Miguel lo hace Villagarcía del Llano, gozando ambos de los festejos del otro. Se celebra una misa en honor a San Marcos, encuentro con los vecionos de Villagarcía, procesión y los tradicionales gazpachos.

San Isidro: Se festeja el 15 de mayo en el pinar de su mismo nombre, situado a las afueras de Quintanar. Allí los vecinos disfrutan de un día “de campo” donde no falta el buen vino y las comidas típicas.

San Cristobal: Se celebra el 10 de junio en la ermita que el santo tiene dedicada en la localidad situada en el mismo pinar donde se celebra la festividad de San Isidro.

Fiestas Patronales en Honor a la Virgen del Rosario: Se celebran del 13 al 18 de agosto, se trata de las fiestas mayores del municipio. No faltan las verbenas, charangas, competiciones, conciertos, actividades culturales…

La Semana Santa se celebra con la «procesión del Paso» una de las más significativas y más emotivas de la celebración de muerte y resurrección de Cristo en esta localidad. En febrero se celebra carnaval (los días varían según el año).

Carnavales: Como en muchas localidades de La Manchuela, cuando llega febrero,  Quintanar festeja el Carnaval, famosos en toda la provincia.

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Fiestas y Tradiciones

San Marcos (Patrón de la localidad): Se celebra el 25 de abril. Quintanar comparte con Villagarcía del Llano una vieja tradición fruto de la intersección de sus patronos en una epidemia. San Marcos y San Miguel se desplazaron paralelamente a sus pueblos vecinos durante aquella epidemia. Desde entonces, el día de San Marcos, Quintanar del Rey se viste de fiesta, y el de San Miguel lo hace Villagarcía del Llano, gozando ambos de los festejos del otro. Se celebra una misa en honor a San Marcos, encuentro con los vecionos de Villagarcía, procesión y los tradicionales gazpachos.

San Isidro: Se festeja el 15 de mayo en el pinar de su mismo nombre, situado a las afueras de Quintanar. Allí los vecinos disfrutan de un día “de campo” donde no falta el buen vino y las comidas típicas.

San Cristobal: Se celebra el 10 de junio en la ermita que el santo tiene dedicada en la localidad situada en el mismo pinar donde se celebra la festividad de San Isidro.

Fiestas Patronales en Honor a la Virgen del Rosario: Se celebran del 13 al 18 de agosto, se trata de las fiestas mayores del municipio. No faltan las verbenas, charangas, competiciones, conciertos, actividades culturales…

La Semana Santa se celebra con la «procesión del Paso» una de las más significativas y más emotivas de la celebración de muerte y resurrección de Cristo en esta localidad. En febrero se celebra carnaval (los días varían según el año).

Carnavales: Como en muchas localidades de La Manchuela, cuando llega febrero,  Quintanar festeja el Carnaval, famosos en toda la provincia.

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Gastronomía

En cuanto a gastronomía se refiere, Quintanar del Rey se beneficia de las bondades de dos tradiciones culinarias por excelencia: la albaceteña y la conquense, por lo que se puede disfrutar de una variedad y riqueza gastronómica de primer orden. No podemos irnos de esta localidad sin degustar platos tan típicos como las gachas, el gazpacho manchego con carne de caza, las migas ruleras o el ajo en el mortero. Son también muy típicos y sabrosos, platos como el potaje, los cocidos, calderetas de cordero y carne de caza, el arroz con pollo de corral, el moje de judías blancas y el pisto manchego.

En Quintanar destaca el cultivo de Champiñón y otros hongos comestibles, siendo uno de los principales activos económicos de la localidad, por eso no se puede perder el sabor de unas patatas guisadas con níscalos o setas de cardo y el champiñón como base de cualquier plato.

Variados y ricos son los postres que podemos degustar desde las migas de niño (migas dulces), las fritillas, los rolletes, las magdalenas, el alajú y por supuesto, los suspiros de Quintanar, famosos en toda la comarca.

Es tierra de buenos vinos, al tener unas condiciones idóneas para el cultivo de la vid. Existen varias Bodegas que producen grandes caldos. Cabe destacar la Cooperativa San Isidro, una de las más importantes de la región, formada por 900 socios, que se ha convertido tras más de 50 años en una de las principales productoras de vinos tintos de España.

Gastronomía

En cuanto a gastronomía se refiere, Quintanar del Rey se beneficia de las bondades de dos tradiciones culinarias por excelencia: la albaceteña y la conquense, por lo que se puede disfrutar de una variedad y riqueza gastronómica de primer orden. No podemos irnos de esta localidad sin degustar platos tan típicos como las gachas, el gazpacho manchego con carne de caza, las migas ruleras o el ajo en el mortero. Son también muy típicos y sabrosos, platos como el potaje, los cocidos, calderetas de cordero y carne de caza, el arroz con pollo de corral, el moje de judías blancas y el pisto manchego.

En Quintanar destaca el cultivo de Champiñón y otros hongos comestibles, siendo uno de los principales activos económicos de la localidad, por eso no se puede perder el sabor de unas patatas guisadas con níscalos o setas de cardo y el champiñón como base de cualquier plato.

Variados y ricos son los postres que podemos degustar desde las migas de niño (migas dulces), las fritillas, los rolletes, las magdalenas, el alajú y por supuesto, los suspiros de Quintanar, famosos en toda la comarca.

Es tierra de buenos vinos, al tener unas condiciones idóneas para el cultivo de la vid. Existen varias Bodegas que producen grandes caldos. Cabe destacar la Cooperativa San Isidro, una de las más importantes de la región, formada por 900 socios, que se ha convertido tras más de 50 años en una de las principales productoras de vinos tintos de España.

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